Está
claro que la maternidad marca un antes y un después en nosotras. De esta
maravillosa experiencia de aprendizajes sin fin cada mamá emprende un nuevo
camino personal o profesional. A veces ambos a la vez, todo en busca de un
equilibrio entre ser mujer, madre y el hogar.
Así nació "La casa de la Lactancia", su mamá Miriam Lepe, su historia la siguiente:
Miriam,
tiene 31 años, es economista y madre de dos pequeños de 5 y 2 años, felizmente
casada con el hombre que le acompaña desde hace 15 años. En su vida hubo un antes y después gracias a la
maternidad, como ella nos cuenta: "la noche en la que salió la raya rosa cambió
mi manera de ver el mundo y la vida, mi manera de sentir y de ser. Ser madre me ha hecho sentir más poderosa como mujer y como mamífera."
¿Cómo
surgió la idea de crear "La
casa de la Lactancia", tienda on-line?
La idea surgió por la simple necesidad. Estaba embarazada de mi segunda hija, a la cual le iba a dar el pecho sí o sí, y mi cuñado se casaba cuando mi hija tuviera un mes aproximadamente, entre que pensaba que mi cuerpo no iba a estar muy estilizado después del parto (cosa que me equivoqué) y que necesitaba algo cómodo para dar el pecho a demanda a una niña de un mes, necesitaba una prenda especial para esta situación, un vestido ideado para mis necesidades.
La idea surgió por la simple necesidad. Estaba embarazada de mi segunda hija, a la cual le iba a dar el pecho sí o sí, y mi cuñado se casaba cuando mi hija tuviera un mes aproximadamente, entre que pensaba que mi cuerpo no iba a estar muy estilizado después del parto (cosa que me equivoqué) y que necesitaba algo cómodo para dar el pecho a demanda a una niña de un mes, necesitaba una prenda especial para esta situación, un vestido ideado para mis necesidades.
Lo
encontré en Francia y decidí que debería ser más accesible a todas las mamás,
así que cuando mi hija tenía dos meses me tiré al toro y monté este proyecto
tan deseado.
¿Cómo
compagina una mamá emprendedora como tú, familia y trabajo?
Haciendo
malabares durante todo el día y, sobre todo, marcando prioridades entre
trabajo, hogar y niños.
Busco un
equilibrio interno para sentirme mejor y ser mejor persona, por el bien mío y,
sobre todo, de mis hijos. Mis aficiones han cambiado y estudio e investigo
sobre ellas, me he vuelto más empática con todo el que me rodea y me he
empoderado como madre y como mujer.
¿Qué
dudas más frecuentes les surgen a las mamás, a la hora de adquirir un producto
en etapas tan especiales para una mujer como son el embarazo, lactancia o
post-parto?
Depende.
Sobre todo en las tallas de la ropa. Es un momento en el que las mamás no se
sienten bien físicamente y dudan de las tallas o cómo quedará.
Siempre
aconsejo de manera personalizada y con nuestro servicio y nuestra ropa de
lactancia diseñada específicamente para el momento suelen acertar y sentirse
bien. En todo caso son libres de devolver algún producto que no les guste o no
sea lo deseado.
Recientemente
te has formado como Asesora de Lactancia, ¿ha marcado un antes y después para
ti y para la tienda?
Mi
maternidad va unida a la lactancia, primero de mi hijo y después en tándem con
mis dos tesoros. Y ahora, que el tiempo vuela y el instinto de succión va
desapareciendo a sus 5 años intento hacerme a la idea que la naturaleza provoca
el destete.
Mi
formación como asesora ha marcado un antes y un después en mi percepción sobre
la maternidad, ha aumentado la empatía con las madres, tanto que dan pecho como
que no dan pecho por diferentes circunstancias. En la tienda tengo previsto
hacer cambios y ofrecer asesorías de lactancia. Los eventos se publicarán en la
web.
Además de la tienda ¿tienes otros proyectos?
Además de la tienda ¿tienes otros proyectos?
Tengo un
blog. www.lacasadelalactancia.com/blog.
Participo
en un grupo de apoyo que hay en mi pueblo sobre crianza y lactancia y formo
parte de algunos grupos on -line donde colaboro cuando puedo.
¿Alguna recomendación para este otoño?
Para el
otoño y durante todo el año recomiendo SER FELIZ, disfrutar de nuestros hijos y
de la familia, mirar cada momento, MIMAR Y AMAR, respetar a nuestros hijos como
si fueran adultos, y valorar y marcar prioridades en nuestras vidas,
reflexionar sobre lo que queremos y donde queremos llegar.
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